15 de febrero de 2008

Rebecca (1940)


Hitchcock + O. Selznick = Obra Maestra


Toda película de Hollywood podría simplificarse en una ecuación matemática, ya que el resultado final no depende de un solo hombre, sino que es la combinación de los diferentes factores (Director, Productor, Guionista, Actores...etc.) la que hace el producto. Naturalmente, mientras más grandes sean los factores, mayor es el producto, y esto justamente lo que sucede en este film, en el que se combinan los talentos de dos maestros de Hollywood en un resultado excepcional.

En 1940 llegó a Hollywood un no tan consagrado director, que se proponía realizar su primera película en América, basandose en la novela psicológica de Daphne Du Maurier, Rebecca. En seguida el calvo director unió sus trabajos a los del productor David O. Selznick, que en ese tiempo estaba ensimismado en lo que sería su más grande proyecto, Lo que el Viento se Llevó. El esfuerzo de estos dos hombres, sumado a la colaboración de Laurence Olivier y Joan Fontaine, culminaron en la producción ganadora del Oscar a mejor película.

En este largometraje el maestro del suspenso, Alfred Hitchcock, nos muestra su lado más amable, con una historia cargada de romanticismo y esperanza, pero nunca carente de su misterio y suspenso característico. Como pueden imaginarse, la trama se desarrolla a través de un asesinato, el de Rebecca de Winter, que tras su misteriosa desaparición deja un espacio muy difícil de llenar en el corazón de su esposo Max y todo el resto de la sociedad que se dejo cautivar por sus inumerables encantos. Con esta película me viene a la memoria una frase que oí decir hace un laaaargoo tiempo: "El mayordomo siempre es el culpable", oración que ha ido tomando sentido con cada película de crímenes que veo.

Entrada de Rebecca en IMDB

1 comentario:

Ramón Ramos dijo...

Sin duda un tandem productor/director como pocos. Y el resultado una película inolvidable.
Saludos,